El bibimbap, una colorida combinación de arroz, vegetales, proteínas y salsa picante, se ha convertido en uno de los platos más populares de la gastronomía coreana. En 2023, fue la receta más buscada en Google, reflejo del creciente interés global por la cultura y cocina de Corea del Sur.
Más allá de su fama internacional, el bibimbap destaca por su equilibrio nutricional, versatilidad y sabor. A diferencia de otros platos, sus ingredientes se sirven por separado para que el comensal los mezcle a su gusto, creando una experiencia personalizada tanto en sabor como en textura.
“El bibimbap se puede preparar con los ingredientes que uno prefiera”, explica la chef coreana Yun Soun Kim (‘Kimmy’), copropietaria del restaurante Ñam Ñam en Santo Domingo, junto a su esposo Gene Ho Lee. “No existe una receta única; lo importante es que sea un plato balanceado, con carbohidratos, vegetales y proteínas”, comenta.
Un sabor que nace del detalle
Aunque la mezcla de arroz, vegetales y proteínas puede parecer sencilla, Kim señala que la verdadera esencia del bibimbap está en la preparación de cada componente.
En su restaurante dominicano, sirven el plato con seis tipos de vegetales, una proteína a elección y un huevo frito sobre el arroz caliente. Cada vegetal se corta finamente, se sala, se exprime y se saltea antes de combinarse, garantizando así un equilibrio de sabores en cada bocado.
“Lo que más gusta es esa sensación de mezcla: cada cucharada tiene un sabor diferente. Además, es un plato muy nutritivo”, afirma la chef. En Ñam Ñam, el bibimbap se sirve en olla caliente, lo que intensifica su aroma y sabor, brindando una experiencia más tradicional y reconfortante.
Infinitas variaciones
El bibimbap es un plato que admite infinitas versiones, dependiendo de los ingredientes disponibles o de la creatividad del cocinero. La versión más clásica incluye arroz, vegetales salteados (namul), proteína y huevo, todo mezclado con una salsa de ají picante (gochujang).
En el restaurante Ñam Ñam, esta versión tradicional es la más popular, aunque también ofrecen opciones más innovadoras como el cheese bibimbap, con una capa de queso mozzarella fundido; el bulgogi bibimbap, con carne de res marinada; y el hot calamari bibimbap, con trozos de calamar y salsa picante.
Sabores que cruzan fronteras
Algunos ingredientes originales del bibimbap, como doraji (flor de campana), gosari (helecho) o chinamul (hierba silvestre), son difíciles de encontrar fuera de Corea. Por eso, Kim y su equipo los sustituyen con productos locales como tayota, brócoli y berenjena, logrando conservar el equilibrio de sabores del plato original.
Según Kim, en Corea el bibimbap es una comida cotidiana, adaptable tanto a un almuerzo rápido como a una presentación más elaborada para ocasiones especiales. “En cualquier casa coreana se puede preparar fácilmente. Basta con tener arroz caliente, algunos vegetales salteados, kimchi y un huevo frito”, explica.
El bibimbap, más que una receta, representa la armonía entre sabor, color y nutrición, valores profundamente arraigados en la cocina coreana.
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